UN BLANCO DÍA

   ARIEN

  Atrás quedaron los días de compras, buscando el vestido, los zapatos, que ahora los notaba     especialmente apretados...
    -¿De verdad que no te hacen daño?
    - No mami me estan muy bién,
     A Isabela le habian gustado nada más verlos, eran los más llamativos con esas pequeñas piedrecitas brillantes, ahora mientras se los calzaba se preguntaba cuanto tiempo podría soportarlos.

     La casa estaba revuelta, todo el mundo con prisas corriendo de una habitación a otra.
     -¿Donde estará la dichosa corbata ?- se preguntaba su padre, mientras su madre trataba de arreglarse a la misma vez que  la peinaba a ella.
     Por fin se vio ante el espejo, parecía una de esas damas que salían en las películas de época que tanto le gustaban a su madre y a ella cada vez más.

     Por el camino, no dejaba de repetir lo que tendría que decir en la ofrenda, notaba como se ponía más y más nerviosa con cada paso que daba. En la iglesia trató de no perder la compostura y no pisarse el vestido una y otra vez al levantarse del asiento, además de estar atenta de no tropezarse al llegar al altar.
     Y así de pronto llegó el final, sin casi darse cuenta.
     Después vino la reunión con toda la familia, sus primas las gemelas Diana y Ariel, primos, tios, abuelos, amigos y compañeros de clase.

     Pasteles, platos variados y una igigantesca fuente móvil de un chocolate que no dejaba de resbalar deleiatando con su inmenso sabor los paladares de todos los invitados y decorando los trajes de los numeroso niños que revoloteaban a su alrededor.

     Luego llegaron los regalos y los besos .. y los ¿que és? ¿que és?

   
     Fue divertido, escandaloso y feliz dia, un dia blanco lleno de luz para el recuerdo, en el album de la memoria.

Hasta otra, un abrazo a tod@s.

NANCYS DE RO E ISABEL.
FOTOS: RO